Sergio Morales
El pasado 27 de Junio todo el mundo del baloncesto se sorprendió al escuchar el nombre de Anthony Bennett como la primera selección del Draft 2013 de la NBA que como todos ya sabían sería para los Cleveland Cavaliers.
Anthony Bennett es un jugadorazo, no hay duda, tiene la muy rara habilidad de un juego fino a la media distancia del aro y la potencia y tamaño para matar bajo los tableros. Es muy difícil de defender porque si le das distancia y lo flotas te matará con su tiro y si te le pegas, te arrastrará con su tamaño y potencia. De esta forma el chico destacó enormemente en la NCAA, el punto es que no es tan alto para los jugadores NBA por lo que no será fácil arrastrarlos y es muy lento para evadir defensas desde la posición de alero. A la defensa no tiene la mejor de las actitudes y por su posición tendrá que esforzarse al doble ya que enfrentará tipos más rápidos, fuertes que él.
El delantero de poder nacido en Ontario, Canada mide 6-8 y pesa 240 libras. Jugó su único año colegial con la Universidad de Las Vegas y sus números fueron buenos más no impresionantes. 16 puntos por juego, 8 rebotes por encuentro, una asistencia y un tapón.
Anthony Bennett no acudió a ninguna de las pruebas que les hacen a los prospectos NBA antes del Draft pues se recuperaba de su operación en el hombro y como decimos los latinos “para acabarla de amolar” llegó con sobrepeso a la ceremonia del Draft.
No había aparentemente una razón “Lógica” para que los Cavs dejaran pasar al increíble centro de Indiana Cody Zeller o al poderoso centro de Maryland Alex Leng sin contar con los otros nombres que se manejaban como Nerlens Noel, Ben McLemore o Trey Burke.
Lo que si había, era una “razón del corazón” proveniente del coach Mike Brown. Una simple corazonada. El coach que regresa a los Cavs esta temporada tiene mucho conocimiento de esta generación de jugadores en el baloncesto colegial pues en ella juega su hijo Elijah Brown quien estudia en Butler.
Brown vio en los mock drafts universitarios del año pasado (cuando estaba desempleado) el talento de Bennett y se dio cuenta de su potencial. Y si, el chico en su mejor forma es un gran jugador, el problema es que no siempre está en su mejor forma porque es muy propenso a las lesiones y como ya se vio en el draft, tiene una gran tendencia a engordar rápidamente.
El dueño de los Cavs, Dan Gilbert, intento negociar esta primera selección incluso mucho antes del draft por la poca claridad en cuanto al talento de los nuevos chicos que llegarían a la liga pero sus esfuerzos fueron infructuosos y no les quedó otra más que tomar lo que la generación les brindaba pero… ¿Es realmente Anthony Bennett el mejor jugador de esta generación?
Habrá que seguir la corazonada del coach Brown.
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