Al menos dos personas han muerto y 18 han resultado heridas como consecuencia del derrumbe de dos edificios en Harlem Este, en el norte de Manhattan, pero se teme que pueda haber más víctimas mortales.
El alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, ha confirmado que se ha producido una explosión por una fuga de gas, lo que ha provocado que los dos edificios de apartamentos, de cinco plantas, se vinieran abajo. “La tragedia se originó por una explosión de gas y sabemos que hemos perdido a dos personas y que hay 18 heridos de diversa consideración y varias personas desaparecidas”, ha dicho el alcalde en una conferencia de prensa desde el lugar del siniestro.
De Blasio ha detallado que las autoridades procederán a buscar entre los escombros una vez que los bomberos controlen el incendio, tras explicar que quince minutos antes de la explosión un vecino llamó a la empresa ConEdison para alertar de una fuga de gas.
“Ha sido una tragedia del peor tipo porque no hubo ninguna indicación a tiempo que nos permitiera salvar a gente”, ha dicho el alcalde, quien ha insistido en que la primera llamada de alerta fue “quince minutos antes de la explosión”.
De Blasio ha comparecido ante la prensa acompañado por el jefe de la policía, Bill Bratton, el comisionado del cuerpo de bomberos, Salvatore Cassano, y la presidenta del Concejo Municipal, Melissa Mark-Viverito. La política puertorriqueña, que representa a ese distrito en el Concejo, se ha dirigido a la prensa en español para pedir a los vecinos que no tengan miedo de ponerse en contacto con las autoridades para pedir ayuda.
“No podemos dar un número específico de desaparecidos pero le pedimos a la gente que se comunique con el número de emergencias 311 para reportarse”, ha dicho Mark-Viverito.
Por su parte, el jefe de los bomberos ha indicado que en estos momentos la prioridad es controlar el fuego desatado tras la explosión antes de continuar con la búsqueda de posibles víctimas entre los escombros. Cassano ha indicado también que si las primeras dotaciones de bomberos hubiesen llegado a la zona de la explosión “cinco minutos antes”, entonces “ahora quizá tendríamos que hablar de víctimas mortales entre nuestros hombres”.
Pendientes 60 denuncias
La explosión ha tenido lugar en la calle 116 a la altura de Park Avenue, y uno de los edificios afectados tenía pendientes 60 denuncias de las autoridades por distintos motivos, según dijo el senador estatal Adriano Espaillat.
En las plantas bajas de los dos edificios derrumbados había una iglesia hispana y una tienda de pianos, y encima había cuatro plantas de apartamentos en los que había gente viviendo, según confirmaron las autoridades.
Un vecino de la zona señaló por teléfono al canal local NY1 que no había olor a gas en el momento de la explosión, aunque otros testigos han asegurado al periódico Daily News que “desde hace semanas” olía a gas.
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